Snowden contra Estados Unidos.
Un valiente civil contra miles de cobardes resguardados por la inmunidad y la impunidad y por millares de uniformados armados.
Un valiente civil contra miles de cobardes resguardados por la inmunidad y la impunidad y por millares de uniformados armados equivocados defendiendo a los que deberían detener y encarcelar.
Todos les tememos. Yo no los quiero y siento lástima por el pueblo más esclavo, libertino y manipulado de Tierra... que, sin embargo, todavía puede producir Chomskys, Assanges, Bradleys, Moores, poetas y a Snowden, lúcidos y terrícolas humanitarios antes que uniformados patrioteros, héroes que arriesgan todo por la Verdad y la Libertad.
Son muchos los mártires ejecutados por criminales políticos que, como excelsos cobardes, se aseguran primero que todo la impunidad, la inmunidad, el conocer las cartas de los demás para jugar con las cartas que ellos sí mantienen escondidas por la codicia sin límites que tienen por todos los tesoros del planeta que creen de su propiedad.
Juegan sobre seguros del resultado final y nos hacen creer que arriegan en los negocios, que son muy hábiles e inteligentes... cuando solo son tramposos criminales.
Así, cualquiera gana y está tranquilo, porque saben que no tendrán que responder por los crímenes atroces que cometan.
¡Se tienen que acabar la inmunidad y la impunidad en el planeta!
Solo hay una Ética y es la inspirada y seguidora del Bien Común. Nada más. Eso es lo Racional y lo justo.
Si la tercera parte (mejor, la mitad) de los consumidores habituales de sus productos se abstuviera de comprarlos hasta que dejaran de tener secretos, patentes inhumanas, inmunidad e impunidad, monopolios, segregación y chantajes... pronto los haríamos Ser Humanos Libres, Racionales y Solidarios de verdad, guiados por el democrático Bien Común participativo. O si las mujeres dejaran de parir por 30 años… ¡mejor!
Todos valientes, solidarios hermanados con los héroes, todos justos, todos honrados y sin que nadie arriesgue el pellejo ni los enfrente por la fuerza brutal.
Igual trato para cualquiera que intente imponer su imperio.
¡El único imperio que aceptamos de hoy en adelante es el del Bien Común obtenido sin afanes por la Democracia Participativa Libre y Racional! ¡Ni religiones, ni políticos, ni fanatismos ni circos! Pero, mientras sigamos llenando estadios para ser indefensos y estúpidos espectadores pagando en vez de caminar o de practicar amigablemente y por placer algún deporte recreativo… nos dejamos “cariar” para asistir a los circos romanos modernos…
eco katío manguruma nasa biófilo
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