Hay que estatizar el Estado para revivirlo, para que retome sus
funciones propias e indelegables
Escuchamos ideas, metas, objetivos,
propuestas para recuperar y sanear el Estado por el bien de todos, para estatizar
el Estado como propiedad-albergue-refugio-herramienta privada de todos y para
todos, hay que estatizar el Estado para revivirlo, para que retome sus
funciones propias e indelegables, para que vuelva a ser el Estado-Patria-madre
de todos y deje de ser el verdugo represor y despojador en el que lo hemos
convertido con nuestra indiferencia ante la descarada audacia y corrupción de
los políticos y burócratas que se lo han repartido, dejándonos desamparados y
burlados a todos, a la vista de todo el mundo… que está igual o peor.
Si el Estado no sirve, si el todo no
sirve, ¿cómo y por qué van a ser mejores sus partes? Y el totalitarismo para
gobernar mal y con corrupción es indeseable, pero el totalitarismo para dirigir
y gobernar bien, con solidaridad y con honradez es lo mejor que nos puede pasar.
Somos la gran mayoría absolutamente
calificada, somos más del 85% de la población (60% de abstención, 10-12% de
votos en blanco, 12-14% de nulos o no marcados y unos cuantos más de los
chantajeados o comprados), somos los amplios ganadores pero “perdemos” las
elecciones por las evidentes marrullas y manipulaciones lingüísticas de la
minoría corrupta que debería estar en la cárcel o ser guillotinados o fusilados.
Al igual que los tales observadores
internacionales tramposos que en vez de manifestarse drásticamente pidiendo la
ilegitimidad de los “elegidos” y de los resultados dados por la Registraduría
que escruta al revés, salen dizque sugiriéndole al gobierno de los mismos con
las mismas mañas que hay que ponerle atención al fenómeno de la abstención,
como si la verdadera oposición no hubiera sido la ganadora absoluta.
Para acabar de ajustar, los pobres partidos
dizque de izquierda, esas pequeñas minorías de las minorías, siguen luchando, feroces,
sin darse cuenta de su miseria en Valores, por las migajas que logran para
satisfacer sus pequeños apetitos materiales y de soberbia infundada. Narcisos hambreados
que son. Reyes de minúsculos reinos. No se oye ni una sola voz que se refiera
al tema cogiendo la sartén por el mango y la espada por la empuñadura. ¿Dónde
está la ONU? ¿Dónde está la Democracia? ¿Dónde está la Justicia? ¿Acaso en las
manos de esa marioneta de procurador fanático cavernícola? eco
katío manguruma nasa LiRSHcA